Una consciencia plena del propio cuerpo y de cómo este se ubica en el mundo resulta en una consciencia plena del derecho de ese mismo cuerpo a habitar el mundo.
Una consciencia plena del propio cuerpo y de cómo este se ubica en el mundo resulta en una consciencia plena del derecho de ese mismo cuerpo a habitar el mundo.
Comparar la guerra con el intento de frenar la expansión del coronavirus, usar lenguaje bélico constantemente es reducir a anécdota el sufrimiento de quienes viven y vivieron entre balas, violaciones masivas, amenazas de tortura y privación de derechos humanos. Y es reducir a la nada, una vez más, el sufrimiento de las mujeres.
La comunidad no desaparece, no importa cómo la trates, antes o después vuelve para echarte una mano. Bienvenidas a Café de Tarde.